miércoles, 20 de enero de 2010

LEYENDA DE LA MARIPOSA Y LA ESTRELLA



Cuenta la leyenda que una joven mariposa, de cuerpo frágil y sensible volaba cierta tarde jugando con el viento, cuando vio una estrella muy brillante, y se enamoró.

Excitadísima, regresó inmediatamente a su casa, loca por contar a su madre que había descubierto lo que era el amor...
¡Qué tontería! Fué la fría respuesta que escuchó.


Las estrellas no fueron hechas para que las mariposas pudieran volar a su alrededor.
Búscate un poste, o una pantalla, y enamórate de algo así, para eso fuimos creadas.
Decepcionada, la mariposa decidió simplemente ignorar el comentario de su madre, y se permitió volver a alegrarse con su descubrimiento.


¡Qué maravilla poder soñar pensaba!


La noche siguiente la estrella continuaba en el mismo lugar, y ella decidió que subiría hasta el cielo y volaría en torno de aquella luz radiante para demostrarle su amor.


Fue muy difícil sobrepasar la altura a la cual estaba acostumbrada, pero consiguió subir algunos metros por encima de su nivel de vuelo normal. Pensó que si cada día progresaba un poquito, terminaría llegando hasta la estrella.


Así que se armó de paciencia y comenzó a intentar vencer la distancia que la separaba de su amor.
Esperaba con ansiedad la llegada de la noche, y cuando veía los primeros rayos de la estrella, agitaba ansiosamente sus alas en dirección al firmamento.
Su madre estaba cada vez más furiosa.
Estoy muy decepcionada con mi hija, decía. Todas sus hermanas, primas y sobrinas ya tienen lindas quemaduras en sus alas, provocadas por las lámparas.


Sólo el calor de una lámpara es capaz de entusiasmar el corazón de una mariposa: deberías dejar de lado estos sueños inútiles y conseguir un amor posible de alcanzar.


La joven mariposa, irritada porque nadie respetaba lo que sentía, decidió irse de la casa. Pero en el fondo, como, por otra parte, siempre sucede, quedó marcada por las palabras de su madre, y consideró que ella tenía razón.
Así, durante algún tiempo, intentó olvidar a la estrella y enamorarse de la luz de las pantallas de casas suntuosas, de las luces que mostraban los
colores de cuadros magníficos, del fuego de las velas que quemaban en las más bellas catedrales del mundo.
Pero su corazón no conseguía olvidar a la estrella, y después de ver que la vida sin su verdadero amor no tenía sentido, resolvió reemprender su itinerario en dirección al cielo.
Noche tras noche intentaba volar lo más alto posible, pero cuando la mañana llegaba, estaba con el cuerpo helado y el alma sumergida en la tristeza.


Entretanto, a medida que se iba haciendo mayor, pasó a prestar atención a todo cuanto veía a su alrededor.
Desde allá arriba podía vislumbrar las ciudades llenas de luces, donde posiblemente sus primas, hermanas y sobrinas ya habrían encontrado un amor.


Veía las montañas heladas, los océanos con olas gigantescas, las nubes que cambiaban de forma a cada minuto.


La mariposa comenzó a amar cada vez más a su estrella, porque era ella la que la impulsaba a conocer un mundo tan rico y hermoso. Pasó mucho tiempo y un buen día ella decidió volver a su casa.


Fue entonces que supo por los vecinos que su madre, sus hermanas, primas y sobrinas, y todas las mariposas que había conocido, habían muerto quemadas en las lámparas y en las llamas de las velas, destruidas por un amor que juzgaban fácil.


La mariposa, aun cuando jamás haya conseguido llegar hasta su estrella, vivió muchos años aún, descubriendo cada noche cosas diferentes e interesantes.


Y comprendiendo que, a veces, los amores imposibles traen muchas más alegrías y beneficios que aquellos que están al alcance de nuestras manos.

Autor Desconocido



16 comentarios:

MA dijo...

Luna precioso escrito he pasado un rato agradable al leer tu entrada ,un beso amiga luna y gracias por tus visitas y comentarios dejados con cariño en mi blog .

Reysagrado dijo...

¡¡Qué razón tiene tu Post de hoy!! Prefiero un Amor entre un Millón, que millones de amores fáciles.

Besos desde mi Estrella...

Anónimo dijo...

Es una bonita historia. Si fuese todo fácil nos perderíamos la mayoría de las cosas bellas.
Besos

Paco Alonso dijo...

Hermosa historia...
Tus letras bellamente conjuntadas alegran la mañana de quien se acerca a tu espacio.
Gracias por compartir.

Cálido abrazo.

Juan Antonio dijo...

Mirando las estrellas me dormía…y soñaba, contigo; soñé que las estrellas se juntaban en el cielo y escribían nuestros nombres con muchos corazones y la luna brillaba tanto como tu recuerdo, como la luz que está en mi corazón, como ayer, como hoy, como mañana. pero, mientras soñaba, vi en el cielo morir la última estrella imperecedera, la última estrella fugaz, mientras que un haz de luz borraba tu imagen de mi mente, de mi corazón del recuerdo que con tanta entrega escribimos, anoche mientras soñaba, las estrellas se extinguían de pronto, tan imprevisto como tu llegada a mi vida, tan rápido como tu partida fugaz, sin un adiós, sin una palabra, sin un abrazo, sin un beso…desperté sobre saltado y comprobé que todo era un sueño…que seguía siendo una mariposa enamorada…besitos

MORGANA dijo...

PRECIOSA TU HISTORIA LUNA..ME LLEGO AL ALMA.
BESOS.MJ

Tatiana Aguilera dijo...

Mi querida Luna:
Tu cuento vino a mi, como la luz que necesitaba, para continuar mi búsqueda y espera por mi propia estrella.
Un besito para ti.

kalima dijo...

Como siempre, que bonita entrada Luna. Es un placer acomodarse a leer en ratito en tu morada, hacerlo da calidez al alma.
Un abrazo

Amanecer* dijo...

Que preciosidad Luna, y que cierto es. Me ha llegado muy dentro esta historia.

Referente a Aranjuez te diré que recomiendo que lo visites alguna vez si puedes, es muy lindo.

Besos.

Anouna dijo...

Muy bella historia, con un final que deja pensando.

Un abrazo enorme mi amiga.

Anouna, me encanta la canción de entrada. Uf!!

Lucero dijo...

Es una leyenda hermosa que deja un lindo mensaje Luna, en este Jueves.. paso solo a saludarte y desearte un bello fin de semana.

Sabes....
¿Con qué se alimenta una flor?
Con muchas gotitas de amor...
Grandes partículas de amistad...
Gran dosis de paciencia...
Y sobre todo; con infinitas dosis de humanidad.
Tú eres la flor de mi amistad...
¡No la dejes secar, por favor!

Gracias por tus comentarios besitosss

Anónimo dijo...

Una magnìfica reflexiòn. A pesar que no debemos dejar de lado nuestro espìritu de lucha por conseguir lo que deseamos, si debemos pensar cuidadosamente sobre los costos que ello pueda tener...

abrazos

Marina-Emer dijo...

precioso el relato de la mariposa y un final feliz besos
Marina

Gala dijo...

No alcanzo lo que deseaba pero en su camino conocio otra felicidad.

Muy bonito

Besitos

Unknown dijo...

Preciosa historìa,la mariposa seguìa
los impulsos de su corazòn,no hay nada imposible si lo deseamos fuertemente y no abandonamos en el intento.
Abrazos.

estrella dijo...

maravillosa historia se debe luchar con el alma para alcanzar nuestros sueños aunke muchos no se concreten queda la satisfaccion de haberlo intentado y no el lamento de un porke no lo intente y la frustracion
de haberte negadoun derecho, linda en verdad, un abrazp luna y bendiciones con amor...luz estrella