miércoles, 15 de julio de 2009

TRISTEZA DE UNA HADA



Erase una vez una hada triste...

Vivia en el mundo de los Hielos Eternos
y no le gustaba.
Sabia que existian lugares donde el sol
brillaba cada dia y donde las flores tenian
todos los colores del arcoiris.
Su corazón añoraba esas cosas aunque no
las habia visto nunca. Añoraba el color y el
calor. Añoraba sentir la hierba bajo sus pies
descalzos y añoraba el vuelo brillante de las
mariposas.
Se sentia tan infeliz que no sabia pensar en
otra cosa y ni siquiera salia a ver sus dominios.
Una noche en que el Hada aún no dormia, un
resplandor especial apareció en el cielo.
Al principio era solo una pequeña mancha
luminosa, que creció y creció y bien pronto todo
el espacio se lleno de color.
Verdes y violetas, azules, amarillos y rojos, se
entremezclaban armoniosamente y su luz
arrancaba destellos del suelo helado como de un
espejo.
Y el Hada miró al cielo y vio estrellas fugaces y
luceros ardiendo, estelas de cometas y nubes
transparentes.
Por primera vez en mucho tiempo, el Hada se
sintió feliz y entendio que aquel era su hogar, que
cada rincón del mundo contiene sorpresas
maravillosas y que le gustaba la aurora boreal y el
cielo estrellado de su pais de Hielo.
Comprendió que muchas hadas jamas verian todo
eso, como ella no veria las flores pero ya no
importaba.
Ahora sabia que las estrellas fugaces son como
mariposas celestes y que los cometas se llevan
muy lejos las añoranzas de las Hadas tristes.


Autor Desconocido

17 comentarios:

Flor dijo...

Lunita
Una história de hadas siempre tiene un final feliz.

Besitos y gracias por el premio
Flor

Liz Marin dijo...

estoy con flor las hadas siempre tienen un final precioso


besitossss

Anouna dijo...

Luna, casi estoy segura que esa hada se llamaba ANOUNA, me parece familiar su historia, tremendamente familiar.

Hermoso, me transportas, me elevas, me llevas de la mano a un mundo de magia y color.

Un abrazo Lunita, que tengas lindo día al despertar.

Anouna.

Sonia Jazmín dijo...

Hola, me encanto el blog, ahora te agrego como una seguidora mas, un beso y ke siga asi el bLog (: mucha suerte

Anónimo dijo...

Precioso Luna, como siempre buen gusto para elegir.

Un abrazo.

MORGANA dijo...

AL FINAL SE DIO CUENTA DE CUAL ERA SU CAMINO..ME ALEGREO POR ELLA Y POR TI.
MIL BESOS PARA TI Y MARIA.
MJ

Manolo Jiménez dijo...

Luna, todas las hadas acaban siendo felices, acaban encontrado su lugar en donde la sonrisa no se quita de su cara.

Abrazos.

HARGOS dijo...

precioso cuento mi luna , un besito desde mi trocito de tierra

Francisco Javier dijo...

Como dice el primer coment, las hadas siempre son felices, nunca al menos que yo sepa estan tristes, aunque mi luna es distinta, es especial, un ser maravilloso y único en el mundo. Gracias por tu premio corazon, cuando vuelva lo subire a mi blog, ahora ya termine de subir una poesía nueva y deje un mensaje de despedida, me retiro para prepararme, e ir a la clínica. Un besote enorme y que lo pases bien en tus vacaciones con tu amiga. Hasta pronto wapa.

JJ dijo...

Una historia preciosa Luna, como siempre.
Es un placer leerte

Arwen dijo...

Tenemos que valorar lo que tenemos en nuestra vida como esa hadita del hielo, un cuento muy lindo, gracias luna, besitos con cariño...

lanochedemedianoche dijo...

Luna, sos maravillosa contando esas historias tan tiernas, me gusta tu delicadeza para escribir cada entrada, sos una bella luna, te aprecio mucho.

Besitos

Evohé Mar dijo...

¡¡ QUE BONITOOOO!! PRECIOSA HISTORIA....

Víctor Cornejo dijo...

siempre hay que apreciar lo que tenemos, valorar lo que la vida nos da, siempre va a ser diferente a lo que tienen los demás..

linda historia y pra reflexionar

suerte

saludos

bye

Mariel dijo...

Sólo... Gracias!
Sentí que yo era la hada triste y me recordaste con tu historia cosas que ya había olvidado. Por favor, no dejes de brillar que tu luz, como el de mi amada Luna, ilumina no sólo a la noche de quienes te rodean...
Con gusto y cariño:
Mariel

Unknown dijo...

Hermosa historia........

Anónimo dijo...

Hermosa historia ,me hizo sentir que yo era esa hada.